No se si escribo estas líneas preso del desencanto o sintiendo impotencia al ver el desarrollo ofensivo del equipo. Creo que quizás escribo estas líneas por hacer callo, como bien le comentaba a un buen amigo mío. Porque es…
Es la madrugada del jueves al viernes, en un lugar aún por determinar (maldito coronavirus) Roger Goodell, vestido con un carísimo traje italiano confeccionado a medida, comienza a caminar hacia un atril colocado en el salón de actos de…