En el momento de escribir estas líneas, los Packers han incorporado a 5 jugadores que no formaban parte del equipo durante la pasada campaña:

1. Aaron Banks (LG), 49ers.
2. Nate Hobbs (CB) Raiders.
3. Mercole Hardman (WR) Chiefs.
4. Kristian Welch (LB) Ravens.
5. Isaiah Simmons (LB), Giants.

Como ya comentamos en artículos anteriores, Aaron Banks viene para apuntalar la línea ofensiva firmando un contrato de estrella, mientras que Nate Hobbs llega al equipo con la misión de reforzar el maltrecho grupo de cornerbacks, tanto por dentro (su especialidad) como por fuera. Mercole Hardman es un jugador que está apurando su carrera dentro del football profesional y deberá ganarse un hueco en el equipo este verano. Su contribución con los equipos especiales puede ser la clave. Para completar la defensa llegan Kristian Welch, un viejo conocido tanto del equipo como de la ciudad, e Isaiah Simmons, que ha pasado de ser todo un número ocho del draft a un juguete roto con dificultades para hacerse con una plaza fija.

En el primer draft de la historia celebrado en Green Bay, el equipo no se movió para elegir a sus proyectos favoritos, lo que le permitió conservar todas sus rondas, incluyendo la séptima cosechada en el traspaso de Preston Smith a los Pittsburg Steelers el año pasado. Primer draft de Green Bay y último de Mike Murphy, que se despide como presidente del equipo dando paso a Ed Policy. Por este motivo, fue él el elegido para anunciar con el primer pick (23 global) al primer receptor de primera ronda en los últimos 23 años. Los elegidos fueron los siguientes:

1. Matthew Golden (WR), Texas (1ª – #23)
2. Anthony Belton (OT), NC State (2ª – #54)
3. Savion Williams (WR), TCU (3ª – #87)
4. Barryn Sorrell (ER), Texas (4ª – #124)
5. Collin Oliver (ER), Oklahoma State (5ª – #159)
6. Warren Brinson (DT), Georgia (6ª – #198)
7. Micah Robinson (CB), Tulane (7ª – #237)
8. John Williams (OL), Cincinnati (7ª – #250)

Había mucha expectación en el Packerverso para saber si este sería el año en el que se rompería la maldición de los receptores con la primera ronda, y vaya si se rompió. Tras el experimento Hunter, salieron McMillan y Egbuka, completando la terna de favoritos que, siendo realistas, se escapaban de nuestras aspiraciones con la selección 23. Sin embargo, para la gerencia seguía estando disponible su jugador favorito. Después de rechazar varias ofertas para intercambiar posiciones con varias franquicias, Murphy daba el nombre de Matthew Golden. Un receptor rápido, muy rápido que puede jugar tanto por dentro como por fuera. Su físico es similar al de Jayden Reed, pero con la ausencia de Watson para casi toda la temporada regular lo más probable es que ataque en profundo las defensas rivales. Su relativa poca producción en la universidad puede hacer arquear alguna ceja, pero las estadísticas no cuentan la historia completa siendo su trayectoria con Texas ascendente y llegando al draft en plena evolución.

Los Packers volvieron a ser los Packers y con su segunda selección global eligieron a un jugador para la línea ofensiva. Aunque elegir kilos de carne para las trincheras «siempre es bien», la sensación es que la gerencia se precipitó eligiendo a Belton demasiado pronto (se proyectaba como una selección por encima de la 100). Su llegada viene a paliar dos déficits del equipo. El primero, la falta de kilos en la línea, 336lb (150+kg), la segunda la falta de espacio el año que viene cuando toque renovar a tres de los titulares a la vez. Aunque su desempeño en la universidad ha sido principalmente desde la posición de placador izquierdo (left tackle), Belton tiene cierta polivalencia para poder jugar también en posiciones interiores.

Al final del segundo día, los Packers anunciaron la llegada de otro receptor para sorpresa del público asistente al evento. Con la selección 87 se anunciaba la llegada de Savion Williams, un receptor con un perfil particular. Es tan bueno recibiendo como corriendo con el balón, lo que le convierte en una herramienta perfecta para que Matt Lafleur experimente con él en jugadas desde el backfield. El techo es hacer de él un jugador del tipo Cordarrelle Patterson, Deebo Samuel o David Montgomery, una amenaza que pueda recibir en corto o correr con el balón el mismo acompañando a Josh Jacobs en la versión quesera del dúo dinámico. Su principal problema son las recepciones falladas, drops, tanto por manos como por falta de concentración.

En el tercer día se producía el que puede ser uno de los robos del draft. Barryn Sorrell veía como caía en la tabla de los elegidos y para cuando su nombre por fin salió, lejos de respirar tranquilo, Barryn tuvo un sentimiento de demostrar al resto de franquicias lo que habían dejado escapar. Y lo que han dejado escapar no es otra cosa que un monstruo atlético que ataca por fuera al QB rival, pero que también puede atacar por el interior debido a su poderío físico.

El resto del día fueron seleccionados Collin Oliver, Warren Brinson, Micah Robinson y John Williams. Oliver es un edge rusher que bien podría jugar de linebacker móvil por detrás de la defensa debido a su gran velocidad punta. Viene lesionado (pie), otro clásico de los drafts de Green Bay. Otra de las tradiciones de Gute es fichar defensas de la Universidad de Georgia. Sea porque compartimos logotipo o sea porque le gusta sus métodos de entrenamiento, Brinson es el quinto bulldog seleccionado por Packers desde 2021, en este caso viene a paliar la salida de T.J. Slaton como nose tackle (tackle defensivo que se posiciona con el center y el guard en una defensa 4-3). Siguiendo con las tradiciones, tenemos aquella en la que en séptima ronda se selecciona un cornerback para desarrollarlo. Robinson sigue la senda marcada por Valentine en 2023 y King en 2024 y se disputará un hueco en el equipo a expensas de lo que pase con Jaire Alexander. Por último, tenemos al compositor de grandes bandas sonoras, John Williams, que ha venido jugando como left tackle las últimas dos temporadas pero que puede jugar también por el interior. Si conseguimos hacer de él un jugador como es Rasheed Walker, habremos logrado un éxito tremendo.

Casi inmediatamente después de finalizar el draft, en la Avenida Lombardi los teléfonos empezaron a echar humo para tratar de cerrar a aquellas perlas que todavía seguían disponibles. El tema de la UDFA (UnDrafted Free Agency) es algo que se toma muy en serio en Green Bay, y forma parte de la tradición que al menos 1 jugador no seleccionado forme parte de la plantilla activa la primera semana de competición. Es una tradición que se ha mantenido durante 20 temporadas y que, creemos, va a continuar al menos un año más gracias a Nazir Stackhouse. En total se han incorporado 11 jugadores:

1. Amar Johnson (RB), South Dakota State
2. Jalen White (RB), Georgia Southern
3. Julian Fleming (WR), Penn State
4. Tyler Cooper (OL), Minnesota
5. J.J. Lippe (OL), Northern Illinois
6. Brant Banks (OL), Rice
7. Nazir Stackhouse (DT), Georgia
8. Jamon Dumas-Johnson (LB), Kentucky
9. Tyron Herring (CB), Delaware
10. Kahzir “Buggs” Brown (CB), Florida Atlantic
11. Johnathan Baldwin (S), UNLV

Que un jugador como Stackhouse caiga fuera del draft cuando por talento y físico estaba proyectado para una 5ª o 6ª ronda es algo que sucede cada año. Lo que no es tan habitual es que seamos capaces de adelantarnos al resto de equipos para fichar a uno de los mejores jugadores disponibles. Antiguo alumno de Georgia como Brinson, competirá con su antiguo compañero por un puesto en la misma posición (nose tackle).

Julian Fleming, receptor, es un jugador que destacó durante su etapa en el instituto pero que ha visto como su dominio no pudo ser trasladado a su etapa universitaria. Poca producción para un receptor grandote ideal para jugar por dentro y que arrastra cierto historial de lesiones. Siguiendo con las posiciones ofensivas, la dupla de runningbacks formada por Amar Johnson y Jalen White tendrá que luchar para hacerse un hueco en un más que poblado grupo de corredores. Johnson es velocidad pura (4,39s) mientras que White es algo más lento (4,57s) pero más productivo. En las trincheras del ataque tenemos tres incorporaciones que han desempeñado su trabajo en la misma posición (protector izquierdo o left guard) y de un peso parecido (unas 300lb o 135kg), Tyler Cooper, J.J. Lippe y Brant Banks. De los tres, el más versátil es Lippe que se ha movido por las cinco posiciones en mayor o menor medida durante su trayectoria universitaria. Banks, por su parte, ha jugado principalmente como protector izquierdo y placador derecho (left guard y right tackle), mientras que Banks es más limitado en ese sentido habiendo jugado solo como protector en ambos lados.

En el aspecto defensivo, tenemos al mencionado Stackhouse y a otros cuatro jugadores más, Dumas-Johnson, Herring, Browm y Baldwin. De los cuatro, el único que no juega en la secundaria es Dumas-Johnson, que ejerce de linebacker. Como el buen jamón, Dumas-Johnson podría ser otro de los «robos» de la agencia UDFA debido a su velocidad (4,60s) y tamaño. La competencia por un hueco en el grupo de linebackers es escasa, por lo que es posible que Dumas-Johnson llegué lejos esta pretemporada y quien sabe, igual hasta forma parte de la primera plantilla a principios de Septiembre. Los otros tres jugadores son «melones por abrir» para el grupo con menos talento de la plantilla, los cornerbacks. Tanto Herring como Brown son cornerbacks puros que juegan principalmente pegados a la línea de cal. Grandotes (6,1″ y más de 200lb) pero con la velocidad justa (4,50s) para poner en apuros a los receptores rivales. Terminamos con un jugador con un perfil similar al de Javon Bullard, Johnathan Baldwin. Aunque se le clasifica como safety, Baldwin ha jugado la mayor parte de su carrera como slot cornerback (defensor de pase interior).

Además de todos estos jugadores relacionados directamente con la franquicia, los Packers tienen el derecho de invitar a otros proyectos a participar en un fin de semana de entrenamientos para probar sus aptitudes sin que exista ninguna vinculación contractual. A este fin de semana se le conoce como Rookie MiniCamp y se ha celebrado este pasado fin de semana. En él participan todos los jugadores que no tienen acreditada una temporada completa con el equipo o la NFL (recién drafteados, UDFAs y jugadores del segundo equipo), además de los jugadores invitados al evento, que son:

1. Taylor Elgersma (QB), Willfrid Laurier
2. Jack Studer (WR), Wisconsin-La Crosse
3. Jaden Smith (WR), Nevada
4. Ali Jennings (WR), Virginia Tech
5. Van Fillinger (DL) Utah
6. Connor Shay (LB), Wyoming
7. Luke Gunderson (LB), Northern State
8. Xander Mueller (LB), Northwestern
9. Brendan Hall (H/P), Montana State
10. Gavin Stewart (PK) Georgia Southern
11. Gage King (LS) Central Florida

De entre estos jugadores destacan Taylor Elgersma y Connor Shay. Ambos jugadores han brillado en el programa deportivo universitario de su país vecino. En el caso de Elgersma, el QB ha ganado el equivalente al trofeo Heisman como mejor jugador universitario del año, mientras que Connor Shay se proyectaba como número 1 del draft de la CFL aunque acabó cayendo al puesto número 6. Elgersma no solo ha despertado el interés de Packers, sino que los Bills también parecen interesados en probarle. Habiendo sido seleccionado por los Winnipeg veremos si opta por una carrera en la CFL o si por el contrario intenta dar el salto a la NFL como sustituto de Malik Willis. También destaca por su físico Luke Gunderson con un RAS de 9,29 incluyendo números elite en varias de las pruebas. Su problema es que para jugar en un programa que forma parte de la segunda división universitaria, no ha destacado todo lo que debería. El resto de jugadores son una mezcla de atletas con buenas aptitudes, o buena producción universitaria, pero con un perfil físico (RAS) que no está pintado completamente de verde, como pueden ser Xander Mueller o Jack Studer. La nota exótica la ponen los equipos especiales, donde vamos a probar a un long snapper, Gage King y a un punter, Brendan Hall, que mide 6´9″ (205cm).

A partir de este momento, entramos en esa fase de la temporada en la que los jugadores deben luchar por labrarse un futuro en la NFL, bien sea con los Packers o bien sea con cualquier otro equipo.

¡Comienzan los juegos del hambre!